En Egipto, la lluvia era un fenómeno extraordinario y excepcional.
Cada año, durante la época de las lluvias, se producía la crecida del Nilo, y con esta inundación anual las tierras se llenaban de limo que era lo que hacía fertilizar la tierra.
Las estaciones del año y la distribución del trabajo dependían de las inundaciones que sufría el Nilo.Cada año, durante la época de las lluvias, se producía la crecida del Nilo, y con esta inundación anual las tierras se llenaban de limo que era lo que hacía fertilizar la tierra.
La primera estación comenzaba en julio con las inundaciones. En septiembre empezaba el tiempo de la siembra y germinación. Y el ciclo terminaba entre finales de abril y el mes de junio con la recolección.