Como en cualquier religión el templo egipcio representaba la casa del dios, el templo debía ser indestructible ya que era la residencia de los inmortales.
El templo se construía para albergar la imagen del dios y como lugar en el que los sacerdotes oficiaban sus ritos. A diferencia de las religiones posteriores no era un lugar de culto y de hecho el pueblo no podía acceder más que a ciertas dependencias exteriores.
El templo se construía para albergar la imagen del dios y como lugar en el que los sacerdotes oficiaban sus ritos. A diferencia de las religiones posteriores no era un lugar de culto y de hecho el pueblo no podía acceder más que a ciertas dependencias exteriores.