martes, 17 de abril de 2012

La noticia

Las características de una noticia



Dédalo e Ícaro


Esparta




El carácter militarista del estado de Esparta se fue volviendo más pronunciado, y la educación de esta ciudad estado quedó volcada en cubrir las necesidades de la guerra.
de acuerdo con Plutarco (Vida de Licurgo) nada más al nacer, el bebe era examinado por una comisión de ancianos en la Lesjé (“Pórtico”, “Soportales”), para determinar si era hermoso y de constitución robusta. En caso contrario se le llevaba al Apóthetas, una zona barrancosa al pie del Taigeto, donde se le arrojaba o abandonaba en una cima. Se buscaba eliminar así toda boca improductiva. Si el niño, o niña, superaba la prueba, era confiado a su familia para que lo criase.Durante la infancia se instruía especialmente a las nodrizas para que lo criaran sin pañales que constriñesen su crecimiento o debilitaran su resistencia al frío y al calor. Al niño se le enseñaba a evitar toda clase de melindres, caprichos o rabietas, y debía acostumbrarse a estar solo y a no temer a la oscuridad.Tanto los niños como las niñas eran criados por las mujeres de la ciudad hasta la edad de siete años, momento el cual los niños varones (paidia) eran apartados de sus madres para agruparles juntos en los denominados agelai. En ese momento eran educados para soportar la escasez y las situaciones más duras. Se les proveía de muy escasa comida y ropa, lo cual favorecía que intentasen robar. Por otro lado, si se les cogía robando eran castigados, pero no por el hecho de estar robando sino por no haber sido lo suficientemente buenos en ello y haber sido atrapados.
 Existe una historia muy característica sobre los robos, contada por Plutarco: «Los niños convirtieron el robo en una cuestión verdaderamente seria, hasta el punto de que uno de ellos, según cuenta la historia, llevaba oculto bajo su ropa un zorro que había robado. Aguantó que el animal mordiera y arañase su cuerpo y prefirió morir por ello antes que dejar que su robo fuese descubierto».
Toda la ciudad vela por la disciplina de los jóvenes. Cualquier ciudadano o compañero de más edad puede reñir a los niños o sancionarlos con castigos físicos: hacerles pasar hambre, morderles el pulgar, azotarlos, etc.  Por otra parte, los chicos eran educados para fomentar la competición entre ellos en juegos y en combates de entrenamiento, a la vez que fortalecían el espíritu de pertenencia al grupo.
Para entrenar el físico, aparte de los castigos y prácticas comentadas con anterioridad, lo más frecuente era apalearlos. El lugar de apaleamiento se encontraba ubicado en un bosque -en un sitio un poco apartado- pero al que podía acceder cualquier ciudadano de Esparta. Lo primero que se hacía era escoger un árbol vigoroso y robusto, al cual se le enganchaba una cadena -en el tronco- y a ésta un palo. Lo que hacía el muchacho era agarrar este palo mientras otros dos de sus compañeros lo apaleaban. Esta acción se llevaba a cabo con varas de bambú, puesto que dolía, picaba y desgarraba la piel. Por si el muchacho se caía de agotamiento o de dolor había otros dos compañeros que se encargaban de levantarlo para que pudiesen seguir apaleándolo.
La finalidad de este ejercicio era, para el que apaleaban, aprender a aguantar y soportar mejor el dolor. Para los que golpeaban, era no detenerse ni vacilar en el ataque aún cuando se sentía el terrible dolor que estaba sufriendo el enemigo. Y en tercer y último lugar, los que sujetaban, la finalidad era que aunque viesen sufrir o incluso morir a sus compañeros en combate no vacilasen y continuasen con la misión que les había sido encomendada por sus superiores.
Esta práctica no se realizaba como castigo, sino que se hacía de forma aleatoria entre los componentes del campamento. Aunque éste también era el castigo que recibían los muchachos a los cuales se les sorprendía robando.
Cuando el que estaba recibiendo el castigo tenía el cuerpo demacrado se le retiraba, pero a no ser que se encontrase muy herido no se le curaban las heridas. Había casos de jóvenes tan arrogantes que por no sucumbir al dolor y por no caer a los pies de sus compañeros preferían morir.
Sus cuatro compañeros -los que apaleaban y los que sujetaban- no podían interrumpir la ceremonia, tan sólo podían aconsejar a su compañero que se soltase. Pero si este decidía no hacerlo se proseguía con la ceremonia hasta arrebatarle la vida.
A los doce años, los niños pasaban a ser jóvenes (meirakion). Se intensificaba su educación física, su disciplina se hacía mucho más estricta y los chicos eran abrumados con una gran cantidad de tareas. Debían andar siempre descalzos, y vestían sólo una túnica tanto en invierno como en verano.sólo los soldados podían ser homoioi. En cualquier caso, e incluso después de eso, incluso durante el matrimonio y hasta aproximadamente la edad de 30 años, pasarían la mayor parte del día en los barracones con su unidad. Los deberes del servicio militar duraban hasta los 60 años, si bien existen casos registrados de personas de más edad participando en campañas en tiempos de crisis.
 La valentía era la principal virtud para los espartanos: Las madres espartanas solían dar a sus hijos que partían a la guerra su escudo a la vez que decían «¡Con él o sobre él!», en el sentido de «vuelve con él, o transportado encima de él» y debido a que en la batalla, el pesado escudo de los hoplitas era el primer elemento que un soldado abandonaba cuando quería escapar.

Grecia: el Periodo Clásico


Una serie de circunstancias favorecieron el apogeo de la ciudad de Atenas. En concreto su papel victorioso en las Guerras Médicas. Razones económicas y de dominio del Este del Mediterráneo condujeron a un enfrentamiento de los griegos con el imperio persa, asentado en Asia Menor.
El comercio que las polis griegas tenían con sus colonias del Este del Mediterráneo y del Mar Negro era entorpecido por los persas, quienes además habían conquistado algunas de las colonias griegas en la costa de Asia Menor. Estos enfrentamientos dieron lugar a las Guerras Médicas (los persas tenían como antecesores a los Medos) en la primera mitad del siglo V.
Se enfrentaban las ciudades griegas con el imperio persa, y para ello tuvieron que unirse en una liga, pues de manera individual cada una de las polis nunca hubiera tenido fuerza para vencer a un imperio como el de los persas. En la primera guerra médica se produjo la batalla de Marathon, en la que un ejército ateniense de 30.000 hombres derrotó a los persas. La segunda guerra médica terminó con el poderío persa, y el resultado de esas guerras no fue solamente el hundimiento de Persia sino el surgimiento de Atenas como potencia, al eliminar el predominio militar de Esparta.

A partir de entonces Atenas fue una potencia militar, económica y política en la medida en que controló la Liga de Delos, una alianza de 200 ciudades, unidas por miedo a los persas que se comprometieron a una contribución militar primero y luego a contribuciones económicas, siendo la Asamblea de Atenas la que tomaba las decisiones en nombre de los aliados en la Liga.
El poderío de Atenas no duró mucho tiempo, pues otras ciudades se opusieron a su dominio y provocaron enfrentamientos contra Atenas: las guerras del Peloponeso arruinaron finalmente a Atenas.


USO DE LA G Y LA J

El grupo nominal

CIVILIZACION GRIEGA


La democracia ateniense


Sintagma nominal

Ortografía; g y j.

Griegos en la Península Ibérica


Grecia: Periodo Arcaico

Durante la Época Arcaica, la población de Grecia creció mucho, demasiado para de la capacidad de su limitada tierra cultivalbe (según un cálculo, la población se multiplicó más de diez veces entre 800 a. C. y 400 a. C., desde 800,000 hasta una población total estimada entre 10 y 13 millones.)
.Hacia 750 a. C. los griegos empezaron 250 años de expansión, colonizando en todas las direcciones. Prácticamente poblaron toda la costa del Mar Negro, Mar Egeo y Mar Mediterráneo y sus islas. 
Estas colonias desempeñaron un papel en la difusión de la influencia griega a través de Europa, y también ayudaron a establecer redes de comercio de larga distancia entre las ciudades-estado griegas, estimulando la economía en la antigua Grecia. 
Mantuvieron las costumbres, dioses y la organización de las polis de las cuales procedía su población. Pero eran comunidades independientes.